Es cierto que el mercado laboral no está atravesando un buen momento y que se encuentra en plena reconfiguración, la cual ha sido impulsada por el acelerado desempleo que crece conforme avanza la crisis sanitaria en el país y por la baja observada en los sueldos reales, que en abril anotaron una caída 0,8% en 12 meses, mientras que en relación a marzo retrocedieron 1,3%.
En este aspecto, de acuerdo al estudio “Rentas no gerenciales” de Randstad, el cual recoge información de las remuneraciones de perfiles comerciales, administrativos y operativos de los diferentes sectores productivos del país; los salarios más elevados recaen en analistas financieros y de control & gestión para un perfil con 3 a 8 años de experiencia en la Región Metropolitana; cuyos sueldos tuvieron un pequeño crecimiento de 3 puntos porcentuales (pp) al inicio de 2020, llegando a 1 millón de pesos bruto en promedio mensual. Le siguen de cerca analistas comerciales y especialistas de marketing, con rentas entre 850 y 900 mil pesos bruto al mes; posiciones que no experimentaron alzas; mientras que los analistas contables, cuya remuneración bordea los 800 mil pesos, tuvieron una caída de 16 pp. en comparación a 2019. Ver calculadora salarial 2019.
Al respecto, Francisco Torres, director de Staffing & Outsourcing de Randstad, dice que esto era de esperar, sobre todo considerando que Chile cerró 2019 con un crecimiento de 1,2%, lo que representa una caída de 2,8 puntos porcentuales (pp) en relación a 2018 y la cifra más baja desde la crisis subprime. Además, el ejecutivo agrega que en noviembre, la Encuesta de Ocupación y Desocupación del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile ya indicaba que el ingreso promedio descendía de $778.000 pesos a $754.000, un escenario que se vio profundizado por el estallido social de octubre y que dejó poco margen para que en 2020 los sueldos mostraran un incremento.
“Estamos enfrentado un escenario complejo, puesto que si bien a comienzos de año esperábamos un mercado laboral menos dinámico y veíamos una economía bastante contraída, indudablemente el covid-19 cambió el panorama por completo y modificó todos los pronósticos. De hecho, si a inicios de 2020 podríamos haber vaticinado que algunas posiciones no gerenciales tenían posibilidades de experimentar una variación positiva, especialmente aquellas ligadas a tecnología y ventas; la emergencia sanitaria frenó esa posibilidad y actualmente hemos observado una mantención en las rentas para los cargos administrativos, comerciales y operativos, con una baja considerable es el número de contrataciones permanentes”, dice.
Igualmente, el experto de la multinacional comenta que desde el inicio de la crisis en Chile, las solicitudes para la incorporación de trabajadores temporales crecieron 346% en 2020 versus 2019, tomando en cuenta el periodo marzo y mayo, lo que se debe a que muchas empresas comenzaron a ver esta alternativa como una forma de enfrentar el actual escenario sin aumentar la planta de colaboradores, especialmente para cubrir licencias médicas y ver cómo se comporta la economía. En este sentido, la última encuesta de la Asociación Gremial de Empresas de Recursos Humanos de Chile (AGEST) reveló que tres de cada cuatro personas que hoy tienen un empleo formal bajo la modalidad de servicios transitorios estaban cesantes o trabajando de manera informal. Ver trabajo temporal y su crecimiento durante la pandemia.
Con respecto a los perfiles no gerenciales que cuentan con las mayores rentas del mercado, el directivo de Randstad explica que se debe a que son posiciones clave en el rendimiento de las compañías. “Por una parte, por más pequeña que sea una empresa, tiene que existir un equipo que dé soporte a las ventas, en este caso ejecutivos comerciales y de marketing; y, por otra, los administrativos de finanzas tienen la labor de apoyar la gestión del área para hacer rentable el negocio y maximizar las ganancias”, dice.
Francisco también comenta que al otro lado del ranking salarial se encuentran guardias y vigilantes, con 370 mil pesos mensuales brutos; cajeros y ayudantes de producción, con 375 mil pesos y una caída de 3 pp en un año; y luego operarios de logística, bodega, picking y producción, con 390 mil pesos y una baja promedio de 9 pp, en relación a 2019. “Estos son justamente los cargos que durante la pandemia han sido altamente demandados por las empresas, al igual que personal de call center por el auge del e-commerce; por lo tanto, si bien no creemos que sus salarios tengan una alza considerable por el complejo momento que estamos atravesando, nuestra estimación es que no caigan, aunque exista una alta tasa de desempleo. Y es que en ocasiones anteriores, cuando hay una alta desocupación los sueldos se han visto directamente afectados”, reflexiona.
Por último, Torres señala que una vez más queda de manifiesto que el mercado laboral es el termómetro de la economía y que los sueldos son el reflejo del momento que vive el país. “Actualmente hay escasas posibilidades de observar alzas en este sentido, por lo menos hasta que el país no retome su curso normal y que la economía se pueda reactivar por completo, reflejándose en la generación de trabajo formal y en la reducción paulatina del índice del desempleo”, acota. Revisa el artículo sobre la caída en la confianza de encontrar un nuevo empleo en Chile.