Al parecer, el freno en la inversión y la consiguiente paralización de proyectos a nivel nacional, ha afectado a uno de los sectores más dinámicos del mercado laboral, Tecnología. Si bien es un rubro en el que existe escasez de talento, por lo que la oferta de profesionales generalmente no alcanza a cubrir la demanda, durante el tercer trimestre del año la rotación laboral en la industria bajó 19 puntos porcentuales (pp) en 2 años, llegando a 21% versus 40% en el mismo periodo de 2014, lo que responde a la baja considerable en el número de trabajadores que señala haberse cambiado de empleo durante los últimos 6 meses. Esto de acuerdo al último Workmonitor, estudio trimestral de tendencias del mercado del trabajo de Randstad.
Desde la consultora explican que la caída de este indicador refleja la disminución del número de requerimientos profesionales para el rubro, pero también es un síntoma de que sus trabajadores se están volviendo más conservadores a la hora de decidir si cambiar o no de trabajo, lo que se observa en el descenso significativo del porcentaje de personas buscando activamente un nuevo empleo, de 40% en el tercer trimestre de 2014 a 25% durante igual periodo de 2016. De todas formas, vale la pena mencionar que estos procesos son cíclicos y que durante los últimos 2 años la economía chilena no ha acompañado lo suficiente como para hacer grandes inversiones tecnológicas; sin embargo queda planteado para los próximos años el desafío de aumentar la productividad y la eficiencia por medio de mayor inversión en automatización de procesos.
Por otro lado, según el estudio, la satisfacción laboral de los trabajadores del rubro también sufrió una caída en comparación al segundo trimestre de 2016, cuando 11% señaló estar “muy a gusto” con su actual empleador; mientras que en el tercer periodo del año solo alcanzó 7%. Ahora, si revisamos la satisfacción hace exactamente 2 años, la baja es aún más brusca, de 20 a 7%, es decir, 13 pp.
Es natural que el actual panorama influya en el ánimo de los profesionales de la industria, debido a que han sido testigos de cómo el clima de incertidumbre ha dilatado el tiempo de respuesta de los clientes para dar cierre a nuevos negocios y cómo su compañía ha paralizado la inversión en innovación tecnológica, por ejemplo. Asimismo, en casos más extremos, algunas organizaciones han hecho recortes de presupuesto en beneficios y en alzas salariales. Aun así, 25% de los trabajadores de IT Services está fuertemente enfocado en obtener una promoción o ascenso en su actual empleo, 5% más que hace 2 años, pero 8% menos que el trimestre inmediatamente anterior.
Lo importante es tener claro que Tecnología es una industria que va en ascenso en Chile y que -sin desconocer que la contingencia del país influye en el comportamiento de la misma- sin duda las políticas públicas seguirán respaldando la inversión en I+D, teniendo en cuenta el importante rol que esta área del conocimiento juega en el desarrollo del país. Por otro lado, existe una alta demanda de profesionales para el sector; basta con observar la gran cantidad de talento extranjero que se está insertando en el mercado laboral nacional, lo que se debe a que internamente no es posible cubrir los requerimientos de perfiles calificados. Los escenarios como este son estacionales y responden a ciclos económicos, sobre todo en una industria que se mueve mucho por proyectos.