Repensar la ambición.
Está surgiendo un nuevo talento ABC que los empresarios deberían adoptar si quieren atraer y retener a sus mejores talentos. Esta es la principal conclusión de nuestro informe Workmonitor 2024 cuando la serie entra en su tercera década.
A Significa ambición.
La gente quiere avanzar en sus carreras. Sin embargo, la ambición ya no se considera en el sentido tradicional de progresión profesional. El talento está repensando lo que significa ambición, poniendo el equilibrio entre la vida laboral y personal, la flexibilidad, la equidad y las habilidades en el centro de las decisiones profesionales.
B Significa equilibrio.
El talento valora el equilibrio entre la vida laboral y personal tanto como el salario. Existe un fuerte y continuo deseo de flexibilidad, tanto en términos de dónde como de cuándo trabaja la gente. Este impulso por un mayor equilibrio también puede afectar el hambre de progreso de los trabajadores, y algunos dicen que su nivel de ambición se ve directamente afectado por lo que sucede en sus vidas personales.
C Significa conexión.
Dado que las divisiones generacionales y geográficas (así como las circunstancias personales) afectan las necesidades de sus trabajadores, los empleadores deben reavivar las conexiones con los colegas para comprender mejor cómo las diferentes trayectorias profesionales y modelos de trabajo se adaptarán a las personas. Esto permitirá a las organizaciones alejarse de las estrategias generales de talento y personalizar sus enfoques.
Para ser vistos como lugares aspiracionales para trabajar, los empleadores deben adoptar la idea de trabajar en colaboración más estrecha con el talento, no sólo a través del desarrollo profesional sino también construyendo lugares de trabajo equitativos donde los trabajadores sientan que pertenecen.
Nuestro informe completo de Workmonitor proporciona información detallada y práctica para los empleadores a medida que forjan estrategias de talento para el futuro. Estas son algunas de las áreas clave de enfoque que impulsarán la agenda de talentos del mañana.
1. Ambición y motivación.
La ambición es más que ascender en la escala profesional y la motivación del talento no está necesariamente impulsada por los ascensos.
Para casi dos tercios de los encuestados (62%) - (60) Global, su vida personal es más importante que su vida laboral. El equilibrio entre la vida personal y laboral ahora ocupa un lugar tan alto como el salario en las listas de prioridades de los trabajadores (94%), más que cualquier otra consideración. Al analizar su próximo paso profesional, la seguridad laboral (por ejemplo tener contrato) es incluso más importante (65%) que un salario más alto (57%).
Un 29% no quiere progresar profesionalmente porque está contento con su puesto versus un (39%) global, y la ambición a largo plazo de la mayoría de los encuestados es un puesto interno estable. Pero eso no les impide querer preparar sus habilidades para el futuro a través de la capacitación 92%, especialmente en áreas como la inteligencia artificial (IA) y la TI, que están remodelando los roles laborales.
Las estrategias de talento de los empleadores deberán reconocer estas prioridades cambiantes y ofrecer caminos de progresión más creativos que se alineen con las diferentes ambiciones de su talento.
2. Flexibilidad.
La importancia del equilibrio entre la vida personal y laboral también se refleja en un enfoque continuo en el trabajo flexible, incluso cuando los empleadores abogan cada vez más por el regreso a la oficina. Muchos trabajadores se adaptaron al estilo de vida de trabajar desde casa durante los años de la pandemia, mudándose más lejos o adquiriendo una mascota, porque esperaban que el trabajo remoto se mantuviera.
Trabajar desde casa no es negociable para cerca de 2 de cada 5 encuestados. Un número similar (37%) se plantearía dejar el trabajo si le exigieran trabajar más días en la oficina.
Sin embargo, hay un matiz a la hora de dar su próximo paso profesional: el deseo de horarios de trabajo flexibles (41% frente a 37% global) supera ligeramente la necesidad de trabajar desde casa 34%. No obstante, la generación Z prefiere en mayor medida trabajar desde casa (45%).
3. Equidad y comprensión.
El talento busca establecer conexiones con los empleadores para poder presentarse plenamente y trabajar con las organizaciones para mejorar la equidad en el lugar de trabajo.
Más de un tercio afirma que no aceptaría un trabajo si no estuviera de acuerdo con los puntos de vista de la dirección de la organización 41% (38% global), y el 54% de los encuestados considera importante la postura y las acciones de su empleador en cuestiones sociales y políticas (57%). 47% No aceptaría un trabajo en una empresa que no coincidiera con mis valores sociales y medioambientales.
Por su parte, el 72% buscan alinearse en cuestiones sociales y medioambientales con un futuro empleador.
4. Inteligencia artificial y capacitación.
El talento sigue dando prioridad a la preparación para el futuro de sus habilidades, especialmente a la luz de la adopción generalizada de la IA. A pesar de las actitudes más complejas hacia la progresión profesional y la ambición, existe una sed continua de formación y desarrollo tanto en los puestos actuales como para futuros cambios profesionales (86% vs 72% global). Alrededor de un tercio (35%) vs (29% global) incluso dejaría un trabajo que no ofreciera oportunidades adecuadas de aprendizaje y desarrollo.
Los encuestados consideran que la responsabilidad de la formación y el desarrollo recae tanto en ellos como en sus empleadores, lo que subraya una vez más el tema de la conexión que recorre toda la encuesta.
Mirando al futuro.
En estos tiempos dinámicos, está surgiendo un nuevo ABC de la gestión del talento para los empleadores. Los cambios se producirán aún más rápidamente en los próximos días a medida que la IA, la digitalización y las actitudes cambiantes de la mano de obra reorganicen la economía mundial y el mercado laboral. Para los empleadores, la necesidad de atraer, desarrollar y retener grandes talentos es más urgente que nunca. Sin embargo, no existe una solución única, ya que las ambiciones, motivaciones y prioridades de los trabajadores están cada vez más fragmentadas