De acuerdo a los resultados del primer trimestre de 2015 del Workmonitor, estudio trimestral de tendencias del mercado del trabajo de Randstad, los chilenos están dispuestos a jubilarse después de lo estipulado en la Legislación Laboral, ya que 39% de los trabajadores señala que se retirará de su empleo entre los 65 y 70 años de edad. Al comprar por género, esta cifra aumenta a 51% en hombres y baja a 28% en mujeres, debido a que más de la mitad (59%) se inclina por el rango de 60 a 65 años.



Natalia Zúñiga, gerente de marketing y comunicaciones de Randstad Chile, señala que esto “era de esperar y ya lo podemos observar en algunas empresas, puesto que, según un informe de la Organización Mundial de la Salud de 2014, la expectativa de vida ha aumentado a 76 años en hombres y a 83 en mujeres, lo que representa un alza de 10% y 7%, respectivamente, desde 1990. Al mismo tiempo, ha mejorado la calidad de vida de las personas mayores de 60, por lo que naturalmente hoy tienen más energía para continuar desarrollando y enfrentando desafíos profesionales”.



La ejecutiva agrega que “es una realidad que hay que enfrentar y es un gran desafío para nuestro país, ya que tanto organizaciones públicas como privadas deben estar preparadas para enfrentar de la mejor forma esta tendencia, generando nuevas plazas laborales, impulsando políticas públicas, fomentando una reforma al sistema de pensiones y dando posibilidades de desarrollo de carrera a profesional que tal vez hace algunos años atrás se consideraban fuera del mercado laboral o a punto de abandonarlo”.



Asimismo, de acuerdo al estudio, 57% de los chilenos cree que es más difícil adquirir nuevas competencias y habilidades después de los 55 años. A pesar de que la cifra se podría considerar alta, es una de las más bajas a nivel mundial, siendo superada por Noruega (45%); Nueva Zelanda (54%) y Dinamarca (55%). En esta misma línea, solo 24% de los trabajadores nacionales opina que las personas de 55 años o más son menos productivas que los profesionales más jóvenes, ocupando los primeros lugares en el ranking mundial en refutar esta creencia: Luxemburgo tiene la primera posición, con 18%; Nueva Zelanda se ubica en el segundo puesto, con 22%; y Argentina empata con Chile (24%).



“Chile poco a poco ha ido cambiando el paradigma en este sentido y hoy las personas mayores de 50 están plenamente vigentes en el mercado del trabajo, no tan solo por el valor agregado y la experiencia que pueden entregar, sino también porque su productividad y el grado de compromiso que adquieren con la compañía es mucho más alto que la de jóvenes profesionales. Son personas que han permanecido 5 años o más en la misma compañía, por lo que naturalmente su nivel de involucramiento es mayor. Por esta razón, las empresas están invirtiendo en este grupo etario y los departamentos de Recursos Humanos están generando políticas diferenciadas para la generación baby boomers”, dice la ejecutiva de Randstad.



Satisfacción de los trabajadores

Respecto al nivel de satisfacción con el empleo actual, la cifra subió 11 puntos porcentuales en un año y 7 respecto al periodo inmediatamente anterior, alcanzando 71% de personas satisfechas o muy satisfechas con su trabajo, el porcentaje más alto desde que se realiza el estudio (2010). Si miramos las diferencias entre edades, vemos que los más satisfechos son los trabajadores que están entre 18 y 24 años (81%), luego los de 55 a 67 (77%) y en tercer la población laboralmente activa que tiene entre 35 y 44 años, con un 74% de personas está muy a gusto o a gusto con su empleo.



Natalia finaliza señalando que esto nos da luces de que el mercado laboral chileno se está reconfigurando. “Las reglas del juego están cambiando en el mundo del trabajo. Primero tenemos a la Generación Z que comienza a ingresar poco a poco a las organizaciones, luego una edad intermedia altamente competitiva y con ganas de enfrentar grandes desafíos, pero sin comprometer su vida personal y, por último están los baby boomers, quienes miran el trabajo desde otra perspectiva, tienen más energía que hace algunos años y quieren quedarse más tiempo en las compañías, porque disfrutan lo que hacen”.