De acuerdo a la última edición del Workmonitor, estudio de tendencias de Randstad, 64% de los chilenos está de acuerdo en que la retención de trabajadores mayores de 55 años es crucial para el éxito de su empresa, ubicándose por sobre la media global (56%) y tercero en el ranking mundial, por debajo de Suiza (73%), Luxemburgo (68%) y empatado con Alemania (64%). Al otro lado de la tabla se encuentra Nueva Zelanda, con 45% de personas que tiene esta convicción; luego Grecia, Polonia y República Checa, todos con 42%; y por último Eslovaquia, con 35%. Por otro lado, y en línea con esta tendencia, la investigación revela que 43% de los trabajadores nacionales cree que las perspectivas de empleo para los mayores de 55 años aumentarán durante los próximos 5 años.
Esto se debe a que la población está percibiendo que se avecinan cambios en el mercado laboral, los cuales probablemente estarán orientados, entre otros, a retrasar la edad de jubilación, tomando en cuenta el aumento de las expectativas de vida de los chilenos y el debate público que se ha generado en torno al bajo estándar de pensiones que tiene nuestro país en comparación a las naciones que componen la OCDE. Por otra parte, las empresas están llamadas a generar planes que incrementen la tasa de participación laboral de este rango etario y programas que apunten a mejorar la productividad a nivel transversal, con el objetivo de reducir los efectos provocados por los rápidos cambios demográficos que estamos viviendo. La clave es que las acciones y programas que se desarrollen, reflejen el nuevo escenario de la composición de la población en Chile.
El estudio también refuerza que el envejecimiento de la población es un hecho en Chile y que generará (y está generando) un impacto importante en la oferta versus la demanda. Si a esto sumamos que las nuevas generaciones no ven como única alternativa tener un trabajo remunerado basado en un contrato indefinido con solo un empleador, esto se vuelve aún más complejo. En este sentido, 68% de las personas encuestadas está de acuerdo con que este fenómeno provocará una disminución de trabajadores activos en el país, cifra con la que nos transformamos en la nación más pesimista a nivel Latinoamericano en este aspecto, seguido por Brasil, con 61%; luego por México, con 59%; y finalmente por Argentina 55%.
Así, y de acuerdo a una investigación de Randstad Research, a pesar de que Chile aún está lejos de ser una sociedad “superenvejecida”, se encuentra entre los países LATAM más avanzados en este camino, con 10% de chilenos con 65 años de edad o más; mientras que en Brasil llega a 8% y en México a 7.
Políticas para atraer y retener talento
Con respecto a las políticas para atraer y retener talento, 53% de los chilenos dice que su empleador tiene prácticas activas para captar trabajadores entre 18 y 30 años, ubicándose por debajo del promedio mundial (64%) y penúltimo en el ranking global (n°33), solo por arriba de Checoslovaquia (47%).Al otro lado se encuentra India y China también en los primeros lugares del ranking de atracción y retención de trabajadores de 55 años o más; con 64% y 58%, respectivamente; mientras Chile se posiciona en un punto intermedio, con 41%.
En línea con lo anterior, en países como China, por ejemplo, no existen mayores de 55 años que tengan “gran miedo” a perder su empleo; mientas que en India, este es el segmento que menos teme quedarse sin trabajo al ser culturas internacionalmente reconocidas por poner a la tercera edad en una posición privilegiada en la sociedad, así que debemos analizar qué podemos aprender de ellas, sobre todo considerando que Chile es la tercera nación del mundo con más gente mayor de 55 años con "gran miedo" a perder su actual posición, alcanzado 10%; luego de Italia (12%) y Grecia (19%). La razón radica principalmente en que las nuevas tecnologías han cambiado abruptamente la manera de abordar los negocios y las generaciones X e Y están teniendo cada vez más protagonismo en el mundo laboral, causando preocupación en los trabajadores con mayor experiencia”, finaliza.